Connect with us
Spread the love

Copa Libertadores 2019, Fecha 5 – Huracán 1 vs. Emelec 2 – Huracán quedó definitivamente eliminado de la Copa Libertadores. A pesar de que Deportivo Lara perdió su encuentro y el equipo salió a jugar sabiendo que dependía de sí mismo para pasar de fase, volvió a mostrar una imagen pobrísima y despertó insultos desde todos lados. Reproches generales, algunos individuales, y final lógico de un ciclo que estuvo torcido desde el primer momento y que se extendió muchísimo más de lo que debía. 


LO BUENO

Pérez: de lo más rescatable del equipo, por rescatar algo. Jugó como doble cinco, otra vez en una posición que no es la suya, pero mostró mucha garra y recuperación en el medio. Además, siempre que pudo se proyectó al ataque, ya sea con la pelota en los pies o intentando aparecer en el área rival. Gran esfuerzo de un juvenil que puso la cara toda la temporada, en los momentos buenos y en los malos, y casi siempre cumplió con sus funciones.

Salcedo: el paraguayo no tuvo ninguna culpa en los goles de Emelec y se mostró firme cuando atacaron por su sector, pero lo más destacado suyo estuvo en el área rival. Ganó en varias oportunidades y estuvo muy cerca de marcar, aunque le faltó suerte. Un par de cabezazos rebotaron en algún jugador rival o propio para no terminar en el arco, y sobre el final del primer tiempo el arquero ecuatoriano le ahogó el grito dos veces en un minuto. Podría haber cambiado el desenlace de la historia, pero la fortuna no estuvo de su lado.

 

LO MALO

Alderete: flojo partido del paraguayo, que jugó por la banda izquierda. En ataque resolvió casi siempre mal, enviando centros que se quedaban cortos o intentando remates desde lejos que muchas veces ni siquiera pasaban al primer defensor que se interponía. En la parte defensiva perdió en ambos goles: en el primero Jaime cabeceó por atrás suyo, siendo mucho más bajo, y en el segundo no marcó ni pudo tapar el tiro de Angulo.

Sills: partido negro del volante central que eligió Mohamed en lugar de Damonte. Totalmente descomprometido con el equipo, se limitó sólo a dar el primer pase y no volver a entrar en juego. Las pocas veces que quiso pasar al ataque decidió mal, tirando habilitaciones sin destino o rematando desde más de treinta metros. Además, erró muchísimos pases y muy pocas veces pudo cortar algún avance del rival.

Roa: el colombiano estuvo errático todo el partido. Acertó muy poco al arco cuando quiso rematar y encontró muy pocas veces a sus compañeros cuando quiso terminar alguna jugada cerca del área. Si bien siempre pidió la pelota y quiso ser el eje del equipo, la realidad es que las cosas no le salieron y terminó hundiéndose en el mismo pozo que el resto de los jugadores de Huracán.

Chávez: nuevamente estuvo desconectado. No pudo entrar casi nunca con peligro al área y en la única que lo hizo definió al cuerpo del arquero. Por arriba tampoco pudo ganar mucho ni logró encontrarse con Gamba o Briasco para armar alguna jugada en conjunto. Hay que reconocerle el esfuerzo y que nunca se dio por vencido, apareciendo incluso en defensa en algún contraataque rival.

Barrios: blanco de todos los insultos y chiflidos desde que salió a hacer la entrada en calor, ingresó en el segundo tiempo cuando el equipo necesitaba sí o sí encontrar el gol de alguna manera. No pudo entrar mucho en juego ni ganar por arriba, pero tuvo una jugada clarísima para descontar luego de un remate de Gamba y terminó pifiándole a la pelota cuando el arquero ya parecía vencido. Su ciclo, al igual que el Mohamed, parece estar llegando al fin.

Juego: Huracán salió a jugar el partido dependiendo de sí mismo para clasificar a la próxima fase, pero no se le cayó una sola idea en los noventa minutos. Con Roa impreciso, Briasco y Gamba que nunca pudieron terminar una jugada bien, Sills que se la pasaba más a los de azul que a los de blanco y Chávez en otra sintonía, al equipo se le hizo muy difícil dominar a su rival y poder abrir el marcador. No hubo, en todo el partido, una sola jugada en conjunto que haya terminado en situación de gol.

Mala fortuna: la suerte tampoco acompañó al Globo ante Emelec, como no lo hizo en todo el 2019. Varias veces los jugadores de Huracán ganaron por la vía aérea cerca del arco de Dreer, pero entre el arquero y rebotes que siempre fueron para afuera, ninguna de esas jugadas terminó en gol. Recién la última del partido, cuando ya no servía para nada, le quedó picando a Gamba y definió para la estadística.

Dos puñaladas: Emelec casi no atacó durante el partido, y antes de que termine el primer tiempo ya se encontraba en ventaja. Luego de una única llegada (un mano a mano en diagonal que desvió Pellegrino con su pierna), encontró el gol en un cabezazo tras un córner y puso nervioso a todo el estadio. Para rematarla, en el segundo tiempo también encontró el gol una de las pocas veces que pasó al ataque, y liquidó el partido cuando todavía quedaban 20 minutos.

Afuera de todo: con los resultados que se dieron hasta ahora, Huracán no sólo se quedó afuera de los octavos de final, sino que además ya no podrá clasificar entre los mejores terceros para pasar a la próxima fase de la Copa Sudamericana. Como mucho, al Globo le quedarán dos partidos en este semestre (ante Deportivo Lara y alguno de la Copa Argentina), con lo que tendrá una pretemporada muy larga y sin actividad.

 

LO FEO

Mohamed: no le salieron las cosas en casi ningún momento. Después de un comienzo con empate ante San Lorenzo y victoria ante Central, cayó ante Racing y todo se hizo muy cuesta arriba. Nunca encontró al equipo ideal, hizo cambios todos los partidos buscando jugadores que reaccionaran, no le pudo llegar nunca al plantel, y tampoco conformó nunca al hincha de Huracán, que sólo le tuvo paciencia por tratarse de un hombre de la casa. Agarró al equipo en zona de Copa Libertadores y lo dejó afuera de la zona de Sudamericana (clasificó por el reglamento y no por lo deportivo). En la Libertadores actual, con un grupo muy fácil, quedó eliminado una fecha antes con cuatro derrotas y un empate. Y en la Copa de la Superliga, perdió ante un San Lorenzo muy debilitado y en el Ducó. Tanto tiró de la cuerda, que finalmente se fue insultado por gran parte del estadio.

Nadur: el Presidente de Huracán también es culpable de este momento horrible que vive el fútbol profesional. Quiso tapar la traición de Alfaro con “la era de la lealtad”, pero por ser leal dejó que Huracán tire a la basura un semestre en el que tenía grandes cosas por pelear: la clasificación a la próxima Copa Libertadores, el pase a octavos de final en un grupo que era muy accesible y la Copa de la Superliga que ofrece importantes premios. No sólo le permitió al técnico quedarse hasta destruir todo lo conseguido el año anterior, sino que además perdió (o está por perder) seis puntos que nos dejarían afuera de la próxima Sudamericana. Para rematarla, este semestre horrible nos acompañará las próximas dos temporadas en la tabla de los promedios, cuando parecía por fin que Huracán podía olvidarse por un tiempo de ese tema.

 

LAS PERLITAS

El mejor: Saúl Salcedo

El peor: Juan Sills

El dato I: dos victorias en 18 partidos consiguió Mohamed en el que fue, seguramente, su último ciclo como director técnico del club.

El dato II: 11 goles en 18 partidos marcó Huracán con Mohamed en el banco, un promedio bajísimo teniendo en cuenta que recibió más del doble (25).

El dato III: 14 tiros de esquina tuvo Huracán ante Emelec. A pesar de lo estático del arquero rival y de ganar muchas veces en los centros, recién en el último Huracán pudo encontrar el gol.

 

Papá de Bianqui, junto a Barbi ? Licenciado en Comunicación Social. Hincha y socio de Huracán, como debe ser. Y admirador del Barça.

Más en Lo bueno, lo malo y lo feo

Sitio protegido por Google reCAPTCHA. Ver políticas de privacidad y términos de servicio.

Soporte Web Efemosse