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Superliga 2018/19, Fecha 11 – Lanús 0 vs. Huracán 1 – El Globo se trajo de Lanús tres puntos que le permiten seguir codeándose con los de arriba. En un partido muy mal jugado por los dos y con un gol en contra en la única aproximación quemera, el equipo de Alfaro siguió sumando y no pierde la efectividad. Un par de actuaciones destacadas le dieron a Huracán ese plus que le alcanzó para ganarle a un rival muy pobre, de ideas y de puntos.


LO BUENO

Briasco: entró por el jugador que le cambió la cara a Huracán en este campeonato, pero esta vez fue él el que modificó el andar del equipo. Primero, porque se sacrificó todo el tiempo para ayudar a Chimino por su banda, que era donde Lanús estaba encontrando más espacios para atacar. Y segundo, porque fue el único (junto a Garro) que pudo pisar con peligro el área rival, más por fuerza propia que por jugadas en equipo. Una de esas guapeadas significó el gol de la victoria.

Pérez: otro interesante partido del juvenil quemero. Metió todo el partido, hasta que debió dejar la cancha por los calambres que lo perjudicaban. Se encargó del lado izquierdo, donde gracias a su aporte Acosta casi no pudo jugar. Además muchas veces apareció también trabando y marcando por derecha. Cuando pudo, se animó en alguna aventura hasta el área rival, aunque sin éxito.

Damonte/Rossi: después de dos partidos que los habían dejado expuestos por los resultados y algunos errores que costaron caro, la dupla de mediocampistas de Huracán tuvo una gran noche. Aunque el equipo jugó poco y ellos casi no tuvieron la pelota, se acomodaron muy bien en la función defensiva y no le dejaron al local más que mandar centros o rematar desde lejos. Sólo quedaron mal parados una vez en el primer tiempo, cuando Acosta recibió en sus espaldas y casi abre el marcador con un remate que se fue cerca del palo.

Salcedo: otro que levantó mucho respecto a las últimas fechas. La Roca volvió a ser la Roca, impasable por arriba y por abajo, mostrando firmeza para disputar la pelota y con la seguridad de no perder nunca. En el primer tiempo debió ser amonestado por una entrada fuerte, pero recién empezaba el partido y Lamolina prefirió dejarlo pasar. A pesar de no tener demasiada altura, no perdió casi nunca en todos los centros y pelotazos que envió Lanús.

Defensa: el sistema defensivo del Globo funcionó bien en general. A pesar de que el local tuvo mucho más la pelota y se jugó casi siempre en campo de Huracán, muy pocas veces pudo generar peligro, y cuando lo hizo fue con remates de media distancia. Bien parados los cuatro del fondo, en sintonía con Rossi y Damonte, el orden final llegó con la entrada de Briasco que equilibró lo que Pérez ya hacía por el otro costado.

 

LO MALO

Chávez: el delantero no participó casi del partido. No generó nada en ataque, pocas veces ganó algún pelotazo o alguna pelota dividida y ni siquiera pudo ingeniárselas para recibir faltas y darle aire al equipo. Su única intervención interesante fue una jugada en el primer tiempo en la que corrió a Acosta hasta robarle el balón. Muy poco para un jugador que sigue estando a contramano del resto.

Planteo: Lanús es uno de los equipos más flojos del campeonato, pero así y todo el Globo salió a darle la pelota, retrasarse cerca de su arco y esperarlo. Claro que con el diario del lunes podemos decir que funcionó y en la única que tuvo Huracán se llevó los tres puntos, pero el planteo fue demasiado amarrete para un equipo que está peleando en los primeros puestos y que demostró tener material para jugar mucho mejor, o al menos intentarlo.

Sin tiros: el Globo le ganó a Lanús sin patear al arco. Durante los 90 minutos, la única vez que la pelota fue hacia Ibañez lo hizo un defensor suyo y terminó en gol. Ni de media distancia, ni de más lejos (mucho menos adentro del área): Huracán nunca pudo crear una chance de gol. En la primera parte, ni siquiera pisó el área rival. En la segunda, con algunas corridas de Briasco y Garro, más la desesperación del local, pudo generar alguna situación, pero ninguna clara.

Exageración: cuando terminaba el partido y Lanús ya era puro centro para ver si encontraba el empate, Lamolina decidió adicionar 6 minutos, en un partido en el que a Huracán no le había salido ni siquiera hacer tiempo. Demasiado tiempo, aunque fue más de lo mismo: intentos sin éxito de Lanús por empatar el juego e intentos sin éxitos de Huracán por controlar la pelota.

 

LO FEO

Roa: el colombiano, jugador clave de este equipo y el diferente con la pelota en los pies, debió salir reemplazado en el primer tiempo por un fuerte choque con un rival. Las rodillas son zonas complicadas y todo hace suponer que no lo veremos hasta el año que viene. ¡Fuerza colombiano!por lo que deseamos que su recuperación sea lo más rápida posible.

Partido: más allá del planteo de Huracán y de lo que haya hecho Lanús, el partido fue malísimo. Sin llegadas, sin polémicas, sin emociones… Para cualquiera que lo estuviese viendo «desde afuera», un verdadero fiasco.

 

LAS PERLITAS

El mejor: Norberto Briasco

El peor: Andrés Chávez

El dato I: Huracán está invicto con Lamolina por partidos de Superliga. Sobre cuatro encuentros que lo dirigió, el Globo ganó dos y empató dos (los anteriores fueron 4 a 2 con Temperley, 1 a 1 con Estudiantes y 1 a 1 con Patronato).

El dato II: Iván Rossi con 31 quites es el jugador que más pelotas recuperó para Huracán. Además es el segundo que más recuperó en lo que va de torneo (datos oficiales de la Superliga).

El dato III: Marcos Díaz, Salcedo y Rossi son los únicos jugadores del Globo que por el momento disputaron todos los minutos del campeonato.

 

Papá de Bianqui, junto a Barbi ? Licenciado en Comunicación Social. Hincha y socio de Huracán, como debe ser. Y admirador del Barça.

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