Superliga 2019/20; Fecha 1 – Boca Jrs 0 vs. Huracán 0 – El Huracán de Juan Pablo Vojvoda tenía una parada difícil en “La Bombonera” frente a Boca, pero demostró estar a la altura de las circunstancias. El equipo mostró varios aspectos propios de su nuevo entrenador en contraste con el dirigido por Mohamed.

Para el comienzo de la Superliga en La Boca, Juan Pablo Vojvoda optó por un once integrado con Antony Silva en el arco, una línea de cuatro defensores compuesta por Gonzalo Bettini y Walter Pérez en los laterales y Saúl Salcedo junto al debutante Mariano Bareiro en la zaga central. El mediocampo estuvo bastante poblado, ya que cinco fueron los volantes que salieron al campo de juego: Adrian Calello y Lorenzo Faravelli por el centro, Norberto Briasco y Juan Fernando Garro por las bandas y Rodrigo Gómez unos metros más adelantado. El llanero solitario en el ataque fue Andrés Chávez. El esquema electo fue un 4-1-4-1, pero que fue mutando con el correr de los minutos.

Huracán salió a la cancha con intenciones de ser protagonista. Los de Vojvoda mostraron una imagen una vez comenzado el encuentro que sorprendió claramente a sus rivales: mucha presión en todas las líneas, adelantado unos metros por encima de lo normal en el campo de juego y con buena circulación de balón. Un “Droopy” Gómez al cual no le pesó el partido y que fue el preferido de sus compañeros a la hora de dirigir los pases. El ex Independiente y Quilmes se paró unos metros por delante de Calello y Faravelli para formar un nexo con Chávez y los carrileros. Tuvo en sus pies, también, la posibilidad de convertir tras una buena jugada en conjunto, pero se encontró con la presencia de Esteban Andrada. El ex arquero de Lanús también dio el presente frente a Garro y Chávez respectivamente, y demostró porque es considerado uno de los mejores del país en su puesto.

Dupla central nueva, pero muy eficiente. Este fue el primer encuentro que jugaron juntos de manera oficial Salcedo y Bareiro, pero realmente no se notó. Los defensores quemeros mostraron un nivel superlativo sobre todo en el complemento cuando Boca se vino cuesta arriba. Para el joven que vino a préstamo desde Racing pero que la última temporada vistió la camiseta de Defensa y Justicia, significó su debut oficial con la camiseta de Huracán y lo hizo con creces. Estuvo vivo para cortar de abajo y fue impasable por arriba.

Un sistema que exigió mucho esfuerzo de los carrileros-extremos. Tanto “Juanfi” Garro como Briasco tuvieron que hacer un gran esfuerzo físico en la noche del domingo. Su posición los obligó a tener atribuciones tanto en ataque como en defensa, tarea para nada fácil. Ambos se mostraron algo dubitativos en algunos tramos del inicio, como no encontrando ubicarse bien en la cancha. Garro tuvo, quizás, la oportunidad más clara en el partido para el Globo, pero dudó y definió mal estando mano a mano con el arquero. Para el segundo tiempo, cuando el equipo optó por defenderse a partir del asedio de Boca, supieron compensar las flaquezas demostradas en el primer tiempo con un gran esfuerzo físico en ambos casos.

Complemento totalmente distinto. En el segundo tiempo Boca hizo un cambio en sus intenciones y salió a comerse vivo a Huracán. El Globo, por su parte, tuvo que replegar sus líneas y apostar a la contra. Más allá de la intención, el equipo dirigido por Gustavo Alfaro, nunca fue lo suficientemente incisivo para poder doblegar la defensa quemera. Tal vez el mejor momento lo tuvo cuando el ex entrenador del globo decidió meter en cancha a Eduardo Salvio. El ex Lanús y Benfica portugués fue una gran mala noticia para Huracán en general con sus escaladas por derecha y su precisión picante. Afortunadamente el paraguayo Silva tuvo una noche brillante y dilapidó toda intención de Boca por quebrantar su valla.

Modificaciones de jugadores y esquema. Al minuto de que Alfaro ordenó el ingreso de Salvio y Mauro Zárate a la cancha, Vojvoda optó por sumar un jugador con condiciones bien defensivas a su mediocampo: sacó de la cancha a Faravelli e hizo ingresar a Federico Marín. El pibe de inferiores se paró al lado de Calello como doble volante central. Cinco minutos más tarde, ordenó el ingreso de Martín Ojeda en lugar de un fundido Briasco. La tercera de las modificaciones fue la de Carlos Araujo, en lugar de un dolorido Pérez.

El equipo aprobó un examen para nada fácil. “La Bombonera” es una cancha que históricamente se presentó complicada para Huracán, y los jugadores supieron quedar a la altura. Hay muchas cosas por trabajar y este resultado debe confirmarse el día viernes cuando recibamos en el Ducó a Colón, pero esto da tranquilidad para encarar la semana de otra manera.