Bajo la lupa vs Atlético Tucumán

Marcos Díaz: Jornada pacífica para un Marcos Díaz que participó bien en las pocas situaciones claras en las que se lo necesitó. Durante el primer tiempo el peligro más serio de Atlético terminó fuera de los tres palos, mientras que en el complemento nuestro arquero se destacó por despejar con los puños una acción complicada y descolgar bien un centro al segundo palo.
Nicolás Romat: Mostró una cara mejor que en su debut ante Quilmes, Romat se desenvolvió con mayor aplomo y logró una interesante solidez defensiva. Aun así su juego delató algunas falencias, no fue incisivo cruzando el mediocampo y le faltó precisión para jugar la pelota. Nicolás aprovechó la oportunidad en un partido que pudo ser sensible para él por su pasado reciente, y con aspectos por mejorar ganó crédito de cara a lo que viene.
Martín Nervo: Buen partido del capitán, muy seguro con la marca y firme en el juego aéreo. Logró una actuación con pocos sobresaltos, mantuvo al mínimo su margen de error y pudo destacarse en medio de una defensa que tuvo su mejor actuación en lo que va de campeonato. Llegó a posición de gol tras córner de Montenegro, sin embargo cabeceó muy mal una opción clara. A seguir así Tincho.
Federico Mancinelli: Lo mejor del fondo, sin sacarle mucha luz a sus compañeros pero con ese timing preciso que Mancinelli ya ha sabido mostrar en muchas oportunidades. Pareció contar con un imán en su cabeza, por la cantidad de pelotas que rechazó de arriba, y logró más de un cruce dentro del área propia que evitó a tiempo situaciones potencialmente peligrosas. Uno de los puntos altos en la noche tucumana.
Emanuel Morales: Caruso lo sacó del freezer y Morales realizó su debut como titular con la camiseta de Huracán, completando una actuación correcta con algunos momentos destacados. Se desenvolvió “con normalidad” en una posición donde el Globo venía quedando muy expuesto, manifestó en su accionar conceptos simples y un buen ritmo de competencia. No mostró credenciales ofensivas ni estuvo fino con la pelota al pie, sin embargo el Chuky hizo méritos para volver a tener una oportunidad como titular. Deberá sostenerlo.
Mauro Bogado: Irregular actuación de Mauro, quien metió mucho pero volvió a mostrar falencias para hacer circular la pelota. Se desenvolvió del centro a la derecha, volanteando cuando el Globo avanzaba en el campo y cerrándose para defender las embestidas rivales. Participó de forma directa en el primer gol, buscando la descarga de Mendoza y metiendo el balón al área para que Kaku habilite a Sosa. Se movió mucho y bien, pesaron negativamente en el global de su participación los balones que perdió en el medio y algunos pases sin destino.
Matías Fritzler: Otra actuación completa de Matías Fritzler, quien estiró una fecha más el excelente nivel que está mostrando. Volvió a ser el equilibrio del equipo, esta vez estuvo mejor rodeando pero eso no le impidió imponer su fútbol en el mediocampo y recuperar muchos balones a puro ímpetu y precisión. Impecable desde el plano físico, el Polaco es jerarquía al servicio del bien común. Una vez más fue el valor más importante de Huracán en el partido.
Luca Sosa: Interesantísimo partido del pibe, quien se vistió de hombre orquesta para aparecer en varios sectores del terreno con resultados positivos. Se desenvolvió como volante, a izquierda de Fritzler, por momentos fue carrilero y en los avances más comprometedores de Atlético se metió entre Mancinelli y Morales. Sorprendió quemando papeles antes del minuto de juego, cuando acompañó el ataque para filtrarse al área en posición de nueve y convertir el primer gol del Globo. Trabajó para que la amonestación no haga mermar la intensidad de su marca, y subió otro escalón en la consideración del Pueblo Quemero.
Alejandro Romero Gamarra: Fue importante para Huracán, en el momento más destacado del equipo en el partido. Kaku aportó rebeldía en un equipo algo acartonado, y asistió a los goleadores en ambas conquistas del equipo. Primero controló perfecto y tomó un segundo para encontrar a Sosa, luego combinó perfecto con Montenegro para ubicar el pase justo a la carrera de Mendoza. En el complemento perdió protagonismo, siendo participe y afectado de la poca tenencia que logró Huracán. Vamos por más.
Daniel Montenegro: Se movió dentro de un triángulo formado por Mendoza, Bogado y Romero Gamarra. El Rolfi fue engancha por momentos y segundo delantero en otros, durante la primera mitad no tuvo demasiado contacto con la pelota pero se las ingenió para intentar ser productivo en sus participaciones. Fue clave en el segundo gol del Globo, gestando la jugada en terreno propio y llegando con resto al área rival para acomodarle el panorama a Kaku con un toque preciso. En el complemento Montenegro sintió el desgaste y terminó siendo reemplazado. Con poco, fue importante.
Diego Mendoza: Que importante fue el gol de Diego Mendoza, por lo que vivió post Caracas y por las tremendas urgencias que tenía Huracán para encontrar un delantero que convierta tras la salida de Ábila. El tanque fue incisivo para molestar a los defensores rivales, volvió a crearse espacios y aguantó bien la pelota en la previa al primer gol. Definió a la perfección en su conquista, esperó habilitado el pase de Romero Gamarra y simplificó la cosa con un certero derechazo entre las piernas del arquero. Mendoza rompió el hielo en la zona calienta del campo y sin dudas sumará confianza para las próximas presentaciones. Esperemos que sea un destape para él.

Mariano González: Ingresó en un momento del partido donde Huracán no lograba agarrar la pelota, y poco pudo hacer Mariano para modificar la ecuación. Se movió del centro a la derecha pero tuvo poco contacto con la globa, más allá de algunas escaladas sin destino. Dio una mano interesante en defensa.
Julio Ángulo: El ecuatoriano falló en todas y cada una de sus intervenciones, sin lograr explotar sus ventajas físicas ni facilidades para el control. A su favor hay que decir que entró para jugar de delantero, y fue muy poco buscado por sus compañeros.
Norberto Briasco: Hizo su primera aparición en el campeonato y pese a juntar pocos minutos en cancha mostró ganas y empuje. No tuvo mucho contacto con la pelota y apenas pisó el área rival.