El presidente de Huracán expresó su bronca por el intento de Atlético Tucumán de postergar la final, que se jugará el domingo, y que otorgará un ascenso a Primera División.
La final entre Huracán y Atlético Tucumán se empezó a jugar de manera anticipada. Tanto en el Norte como en Buenos Aires se vivió una jornada más que movida en lo que respecta al partido que se jugará el domingo y que otorgará un ascenso a Primera.
Desde el recital del Indio Solari, pasando por los organismos de seguridad hasta el paro de pilotos que dejará sin vuelos a todo el país… Todos temas que se trataron en la tarde del jueves y que pusieron en riesgo la realización del juego.
Lo cierto es que ayer Leonardo Comparatore, ministro de Seguridad de Mendoza, le había agregado un gran signo de interrogación al asunto: “Nadie de AFA me llamó. Nos enteramos que ese partido se juega acá por los medios”. Claro, por la tarde llegó la notificación y el problema se resolvió: el encuentro se disputará como estaba estipulado con la presencia de 130 efectivos y a puertas cerradas. Aunque el espectáculo que brindará el Indio Solari el sábado en esa provincia también jugó su papel, debido a la organización.
¿Paro?
Ahora bien, con el partido confirmado, el inconveniente se trasladó al paro de pilotos programado para hoy que complicaría el traslado del plantel de Atlético a Mendoza y que obligaría a la dirigencia tucumana a rever una posible postergación. El grupo tiene vuelo a última hora y se presentará en aeropuerto.
De todas maneras, este aspecto no influiriría en la delegación quemera, que viajará el sábado.
Nadur, con bronca
El presidente de Huracán, Alejandro Nadur, se mostró sorprendido ante estos impedimientos que circularon en las últimas horas. “Es sorprendente. No lo puedo creer. El partido se juega el domingo. El martes estaba todo solucionado”, disparó el directivo en declaraciones a este medio.
“No van a tener problemas para viajar”, agregó en referencia a lo que podría ocurrir con el plantel de Atlético. Y disparó: “Parecería que es la última excusa para no jugarlo”.
Lo cierto es que, con palos en la rueda, el partido no correría riesgo de suspensión. Aunque la bronca en Huracán perdura debido a la información que llega desde Tucumán.
